Decididamente, voy a dejar de leer la prensa. Es mejor no enterarse de nada. Leo en el diario oficial de los progres papanatas, El País, un artículo lacrimógeno sobre la injusticia lingüistica que se comete en Ceuta y Melilla con los ciudadanos que hablan árabe y bereber.
Como no podía ser de otra manera. los independentistas de ERC, catalanes, donde es imposible escolarizar en una guardería a un niño en castellano, y donde no se enseña a los niños el idioma materno si este es el castellano, pues se lamentan de lo inconstitucional que resulta que unos padres no puedan escolarizar a sus hijos en el idioma materno.
Hay que tocarse los cojones porque eso es precisamente lo que se impide en Cataluña y lo que se practica sobre los castellanohablantes, eso sí, se hace con impunidad absoluta y aquellos que tienen la osadía de perder su tiempo y su dinero en ir a los tribunales, a parte de no conseguir absolutamente nada de nada, en España la justicia es de risa sardónica, en este caso de sardana, son tachados de fascistas y nazis.
Como este país está plagado de un papanatismo genéticamente irreductible, y de un buenismo idiotesco que roza la gilipollez apabullante, advierto a los inocentes e incautos ciudadanos de Ceuta y Melilla que en Cataluña todo empezó con un: "en catalá, sius plau" (en catalán, por favor). Y de eso se ha pasado a estar todo, absolutamente todo en catalán, las escuelas monolingües y en catalán, claro, con distintos niveles de catalán, A, B, C, D, que hay que ir adquiriendo mediante cursos y que suelen ser exigidos por las empresas, en especial por las que son dependientes o tienen algún contrato con la administración, y ya el sumun de los sumun, te pueden multar por no rotular los negocios en catalán, no atender a los clientes en catalán o no dar las facturas en catalán. Todo es denunciable y existen organizaciones privadas financiadas con dinero público que sólo se dedican a eso, a buscar, rebuscar y denunciar. Además, son denuncias anónimas, como ocurría con la Inquisición.
El resultado de tan maravillosa política, secundada por sindicatos, partidos políticos, entidades culturales, empresas varias y una legión de organizaciones ciudadanas que viven de la teta del pesebre identitario catalán, es crear más y mejores independentistas.
Si en Ceuta y Melilla quieren encontrarse con una población viviendo del pesebre identitario, poniendo multas, con cursos de idiomas, cambio absoluto de la rotulacion oficial y un papanatismo idiotizante totalitario que multe a los más díscolos, vamos, si quieren vivir en el infierno, sólo tienen que seguir los interesados consejos de la gente de ERC.
joder!, y yo que vivo en Manresa sin enterarme
ResponderEliminarHola Pepe. Afortunadamente hay una parte importante de la ciudadanía catalana que no se entera absolutamente de nada, hacen su vida, trabajan, y la política les importa un pimiento. Hace poco hablando con un conocido me confesó que no se había enterado ni de la manifestación de los 70.000, 1.500.000 para otros, ni de lo del Estado de la Nación, ni de las cosas estas del Estatuto... Me pareció estupendo para él, así se vive mucho mejor y más tranquilo, y sinceramente, sentí envidia por esta capacidad para vivir el día a día totalmente ajeno a la política, pero padeciendo las consecuencias de la política de un grupo de subnormales profundos.
ResponderEliminarSaludos.