Shakira en Barcelona

La cantante colombiana Shakira, la del waka waka, la de los mensajes subliminales satánicos en todas sus canciones incluida esa, está en Barcelona. Algunos dicen que lleva ya dos meses viviendo en la ciudad condal.

El asunto es que Shakira se ha mostrado muy accesible a los barceloneses y ya circulan en youtube vídeos donde se la ve bailar y cantar con los viandantes. Y sí, allí se la ve bailando dentro de una fuente pública, y montada en una moto sin llevar el casco obligatorio. El caso es que Barcelona, la ciudad de los carteristas, las señales de estacionamiento, azul, verde, blanco, amarillo,rojo, por todos los rincones, la ciudad estupenda para los turistas despistados que no han de padecerla, sólo gozarla unos días, pretende multar a Shakira por bailar dentro de una fuente, ocurrencia que por lo visto vulnera las ordenanzas municipales, y también por ir montada en moto sin casco, que esto ya se ve más normal. Y aún otra multa le podría caer por filmar un video promocional en Barcelona sin haber pedido licencia municipal para ello, que aquí está todo medido, tasado y pesado.

Parecería que en Barcelona la Ley se cumple y ciertamente la ciudad es asfixiante, bonita, pero en ocasiones opresiva y descarnada, así que lo mejor es mirarla con ojos de turista, sin coche, claro, y de forma festiva, porque así sí que se llevará uno una visión positiva y equivocada de la actual Barcelona tuneada desde hace décadas por los pijos burgueses socialistas.

Pero vamos a las leyes.

En Cataluña gran parte de los coches oficiales, y los de uso público, ambulancias, bomberos, policías, evidentemente también los particulares de los políticos, lucen el CAT en las matrículas. Este CAT en ocasiones tapa completamente la E de España.

¿Se multa a estos vehículos? La respuesta es que ya sería raro hacerlo porque es la propia policía, ya sea la autonómica o municipal, la que en ocasiones luce esta irregularidad que es motivo de multa en el código de la circulación.

Pese a esta borrachera oficial por matricular en CAT, los particulares suelen pasar de estos asuntos y es más fácil encontrar un extranjero deseoso de integrarse con un CAT en su coche, que un catalán. Lo que sí se ve, incluso más que el CAT, por lo menos en la provincia de Tarragona, es la pegatina del burro catalán, algunos de ellos con un CAT dentro.

El mensaje de las autoridades catalanas es claro: "pon un CAT en tu matrícula tapando la E, que nosotros ya llevamos uno en el coche oficial y en el de policía".

¿Alguien se ocupará de que la ley se cumpla para todos, o sólo se ha de cumplir contra los ciudadanos normales, incluida Shakira, a la que tal vez, pese a su segundo apellido, Ripoll, como se le ocurra abrir un negocio en Barcelona, la multen por no rotularlo en catalán? Advertida queda. Por muy satánica que sea la chica, no sabe aún con quien está tratando.