Han pasado los días y los medios de desinformación siguen sin informar a los ciudadanos sobre el tema de los controladores. No es un tema menor, pues se ha militarizado a un grupo de civiles a los que sin haber elegido la carrera militar, se les despoja temporalmente de derechos fundamentales. Tampoco es un tema menor en el sentido de que han sido militarizados con el aplauso general de la chusma. Y si hubieran sido lapidados públicamente, tampoco habrían faltado los aplausos.
Ocurre todo esto ante la silenciosa mirada del resto de partidos políticos, sindicatos, prensa, juristas y organizaciones ciudadanas, esas mismas organizaciones ciudadanas que no tardan ni un segundo en sacar gente a la calle cuando de lo que se trata es de pedir una transferencia concreta para alguna CC.AA, un reconocimiento legal de alguna potestad medieval o la ilegalización de las corridas de toros, por crueles, pero legalizando los toros embolados, que el olor a carne quemada nunca hace daño al estómago si es de toro.
Rebuscando mucho por internet, perdiendo mucho tiempo, intentando informarse por más que los medios de desinformación intentan vociferar la versión oficial y poco más, las ilegalidades, las tropelías, los abusos laborales cometidos por el gobierno de Zapatero de forma directa en sus dos Reales Decretos, o la ilegal militarización de los controladores aéreos, o lo que es lo mismo, la vulneración de derechos fundamentales, da para escribir varios folios, no menos de diez.
En internet manda lo escueto. Todo en el mundo moderno ha de ser corto, tan corto como el número de neuronas que se utilizan. Así que el vocabulario no debe exceder de 200 palabras elementales y los artículos deben poder leerse en dos o como mucho cuatro minutos. Si se puede leer en un minuto o menos, tanto mejor.
Hace tiempo que las agencias de planificación política descubrieron que cuanto más complicado es un tema, mejor se puede mentir y engañar al populacho. Porque el populacho no entiende de tramas. La solución ha de ser: blanco, o negro. El mensaje ha de ser corto, elemental, tan tonto que el más tonto pueda entender quien es el malo y quien es el bueno.
En esta historia, el gobierno ha planificado un crisis en la que ellos son los buenos, los controladores son los malos. Ellos cumplen la legalidad, los controladores la violan. Los controladores secuestran, el gobierno, que es el verdadero secuestrador, AENA fue la que cerró el espacio aéreo tomando como excusa algún rebote aislado, libera al populacho.
Para los idiotas que nos hemos molestado, y perdido horas y horas en investigar el asunto, plan detectives, la realidad es que el gobierno ha vulnerado en reiteradas ocasiones, de forma delictiva, todas las leyes laborales con los controladores. Han tensado las cuerdas buscando una explosión que sabían se produciría, y han aprovechado una explosicón puntual en algunos puestos de trabajo para, vulnerando la Ley, suprimir los derechos más elementales de un colectivo de ciudadanos.
Es suficiente con explicar, y esto lo dicen los juristas, no yo, que con un Estado de Alarma, no se puede militarizar a civiles. Esto sólo es legalmente posible bajo un "estado de excepción o de sitio".
Eso es lo primero y más grave, pero es que además, no se pueden vulnerar derechos laborales elementales, como es el de Incapacidad laboral Transitoria, o el de Baja por Maternidad, por la gracia de un R.D. , redactado a las 14 horas, publicado en el BOE a los pocos minutos, y que unos minutos más tarde te estén llamando a tu casa para que trabajes las horas que has estado de baja por un resfriado, una pierna rota, una operación de estómago, el nacimiento de tu hijo o un accidente de tráfico. Esto no se puede hacer, pero si no tragas, estos ministros incultos que tenemos, llaman a eso: "sedición", "revuelta", "complot", "absentismo", "huelga salvaje".
Lo trágico de este asunto, es constatar, una vez más, como el poder político pisotea los derechos de los ciudadanos, tuerce la legalidad vigente, esclaviza a la población, corrompe la Constitución con interpretaciones alejadas y contrarias a la misma, todo, ante la palurda mirada de una chusma dispuesta a creer las mentiras de una casta política corrupta que ha hecho del engaño, el disparate y las conjunciones planetarias, su forma de ser, sentir y gobernar al populacho bobo y estúpido que acepta sin inmutarse la militarización, ilegal, de civiles, pero considera irrealizables esos otros mandatos contitucionales, legales, que obligan a los poderes públicos a realizar políticas que lleven a conseguir el Pleno Empleo, o un trabajo justo, o una vivienda, o una educación digna, o una información equilibrada e imparcial. En definitiva, si te dejas tratar como a chusma descerebrada, se tiene el pais que tenemos.
Lo inquietante es la naturalidad pastueña con la que el personal acepta - nada más y nada menos- que se instaure un estado de alerta por un conflicto laboral.
ResponderEliminarEs más que matar moscas a cañonazos: es un experimento en toda regla para tomar el pulso social a acontecimientos venideros.
Con ésto sucede como con aquella autorización del Parlamento a Zapatero para negociar con ETA: que a lo tonto lo tonto, sigue vigente por la gatera, por la vía de los hechos consumados.
Si se tolera esta aberración, la seguridad jurídica queda sustituida por la arbitrariedad gubernamental.
Y eso sí que es peligroso.